Cómo ayudar a su bebé a aprender a gustarle nuevos alimentos y texturas
¿Sabías? Es posible que su bebé necesite probar algunos alimentos y texturas varias veces antes de que esté feliz de comerlos.
Como padre, probablemente ya sepa que una dieta equilibrada y nutritiva es importante para el crecimiento y desarrollo saludables de su bebé. Y ahora es un momento crítico para que desarrolle el gusto por una variedad de alimentos. Este proceso lleva tiempo, ya que se familiariza con nuevos sabores y texturas. Su bebé puede optar por no comer algo nuevo al principio o sospechar de algo desconocido en su cuchara. No se desanime. Pueden ser necesarios varios intentos antes de que su bebé aprenda a gustarle un nuevo alimento. La clave es intentarlo, intentarlo y volver a intentarlo. Así como su pequeño puede necesitar probar un nuevo sabor varias veces antes de aceptarlo, las nuevas texturas también requieren tiempo.
Nuevas habilidades, nuevas preferencias
De los ocho a los diez meses, su bebé está aprendiendo a manejar alimentos con nuevas texturas. Tiene que mover la lengua de un lado a otro para empujar la comida hacia sus encías para machacarla. Su mandíbula y lengua también comenzarán a usarse para triturar comida.
Los alimentos que le parecían suaves y consistentes hace un par de meses, ahora se ofrecen con bultos, protuberancias y trozos que podrían sorprenderla. Los dientes podrían estar saliendo, lo que también puede influir en lo bien que maneja las nuevas texturas. Los bebés pueden ser comensales impredecibles: puede que hoy prefiera una textura que se derrita fácilmente en la boca, pero la semana que viene preferirá una textura más grumosa. Intenta ser paciente y dale muchas oportunidades para que aprenda a aceptar nuevas texturas.
"Ofrecer un alimento o una textura que a su bebé inicialmente no le gusta al menos en ocho ocasiones diferentes puede parecer mucho", admite Lynda O'Neill, PhD, nutricionista senior de Nestlé Nutrition en Michigan, EE. UU., "Pero la evidencia muestra que ofrecer puede ser necesario un nuevo alimento o textura varias veces para promover la aceptación. Es más probable que la exposición repetida sea efectiva durante el primer año, cuando los nuevos sabores se aceptan más fácilmente ".
No quieres, no desperdicies
Cuando le ofrezca un alimento nuevo a su bebé, sírvale un poquito o una porción pequeña para que no lo desperdicie. Guarde las sobras en el refrigerador para que pueda ofrecerlas fácilmente en la próxima comida o al día siguiente, para un segundo o tercer intento. También puede intentar servir la nueva comida mezclada con una comida popular para ayudar a "unir" el nuevo sabor o textura.
Mira hacia el futuro
Un estudio científico reveló que los niños a los que se les introdujeron los sólidos grumosos después de los nueve meses comieron menos frutas y verduras cuando tenían siete años, en comparación con los bebés que comenzaron a comer alimentos grumosos entre las edades de seis y nueve meses. "Es importante que los bebés pasen a nuevos sabores y texturas en el momento adecuado", explica O'Neill. "La exposición temprana es importante para el desarrollo a largo plazo de las preferencias alimentarias de los niños".
Sources
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Last revised: December, 2017