El pescado en la alimentación del niño
El aporte del pescado a la alimentación del niño radica en que es una excelente fuente de proteínas, vitaminas y minerales, elementos que deben estar presente en el menú del niño, 3 a 4 veces por semana.
Aunque a veces es difícil acostumbrar a los niños a comer pescado, es importante que forme parte de la alimentación del niño por sus múltiples beneficios, por lo tanto, incorporarlo al menú del niño es ideal. La grasa del pescado, es una buena fuente de ácidos grasos Omega-3, que son reconocidos por sus múltiples beneficios en la salud de niño.
Los cambios en la alimentación del niño, comienzan, en algunos casos, a partir de los 9 meses, cuando se comienza a introducir en el menú del niño, pescado. En general, suele ser pescado blanco el que se incorpora al menú del niño, pues es menos propenso a producir alergias. El aporte del pescado a la alimentación del niño radica en que es una excelente fuente de proteínas, vitaminas y minerales, elementos que deben estar presente en el menú del niño, 3 a 4 veces por semana.
Al modificar la alimentación del niño, al principio puede ser difícil acostumbrarlos a comer pescado, y la incorporación al menú del niño se torna un poco más lenta. Aún así, es importante que el pescado sea parte de la alimentación del niño ya que los beneficios para la salud del niño son esenciales para un crecimiento saludable.
Ácidos grasos en la alimentación del niño
En el menú del niño, el Omega-3 aporta con grandes beneficios para la salud del niño: ayuda a controlar el síndrome de déficit atencional y aporta para la concentración del niño ya que son imprescindibles para el normal funcionamiento de la parte del cerebro que coordina las funciones de memoria y razonamiento, siendo un gran aporte para la salud del niño.
Otro beneficio del Omega-3 en la salud del niño, tiene que ver con el sistema inmune. Se ha demostrado que el Omega-3 en el pescado beneficia la salud del niño pues posee una función reguladora de la síntesis de sustancias que causan trastornos como fiebre, dolor, hinchazón e irritación.
La causa de que el pescado se recomiende incorporar al menú de niño es por la cantidad de beneficios que aporta a la salud del niño y su futuro: evita problemas cardiovasculares, permite al cerebro captar más rápidamente las imágenes que observa, favoreciendo la visión y regula la presión arterial. Se ha comprobado que su consumo durante el embarazo permite tener niños más brillantes y sociales, por lo que es excelente que esté presente también en la alimentación del niño y de la mamá.
La mayoría de los pescados contienen ácidos grasos Omega-3; sin embargo, es el salmón el que posee más ácidos grasos que el pescado blanco. Es muy importante incorporar a la alimentación del niño el salmón, por lo menos, dos veces a la semana, para complementar el menú del niño. Por sus beneficios a la salud del niño, es importante enseñarles a comer pescado y hablar de sus beneficios para lograr mayor aceptación y ser parte de la alimentación del niño.
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